12.10.08

chachachá


Al finalizar el segundo bis, el saxofonista asmático resopló de tal forma que de su instrumento salió una nota armónica y perfecta, y la chica de las maracas, enamorada en secreto del músico, no pudo más que extasiarse, lo que provocó que una de sus maracas, la de la mano derecha, volara de puro placer, con la mala fortuna de impactar en la calva, también armónica y perfecta, del jurado del concurso de baile, un accidente con el que se dió por finalizado el IV mundial de bailes latinos para tortugas menores de quince años.

Minha Galera - Manu Chao